Claves y acciones para mejorar la experiencia del cliente
La experiencia del cliente (CX) se ha convertido en el factor diferenciador clave en el mundo empresarial actual.
Más allá de ofrecer un buen producto o servicio, las empresas que realmente prosperan son aquellas que se enfocan en crear una experiencia memorable y positiva para sus clientes en cada interacción.
¿Qué es la experiencia del cliente?
Se refiere a todas las interacciones que un cliente tiene con una empresa a lo largo de su ciclo de vida. Desde el primer contacto hasta la postventa, cada interacción contribuye a la percepción general que tiene el cliente sobre la marca.
7 ventajas de la experiencia del cliente
Mejorar la experiencia del cliente tiene múltiples beneficios para tu negocio, tanto a corto como a largo plazo. Entre las que se destacan las siguientes:
- Aumenta la conversión: si ofreces una CX positiva, es más probable que el cliente compre tu producto o servicio, ya que se sentirá más cómodo, seguro y satisfecho con su decisión.
- Reduce el coste de adquisición: si cuidas la CX, no tendrás que invertir tanto dinero en publicidad o promociones para atraer nuevos clientes, ya que los clientes actuales te recomendarán y te traerán más clientes de forma orgánica.
- Incrementa el valor de vida del cliente: si mantienes una CX consistente y de calidad, lograrás que el cliente repita sus compras, aumente su gasto medio y se mantenga fiel a tu marca durante más tiempo, lo que se traduce en un mayor retorno de la inversión.
- Mejora la reputación de la marca: si generas una CX memorable, conseguirás que el cliente se convierta en un embajador de tu marca, que comparta su opinión positiva en redes sociales, plataformas de opinión, foros, etc., y que te ayude a mejorar tu imagen y tu posicionamiento en el mercado.
- Fomenta la lealtad del cliente: Una experiencia positiva del cliente promueve la fidelidad a la marca, lo que significa que los clientes estarán más inclinados a volver a comprar en el futuro y a recomendar tus productos o servicios a otros.
- Diferenciación competitiva: Una excelente experiencia del cliente puede convertirse en un factor diferenciador clave en un mercado competitivo, ayudando a tu negocio a destacarse frente a la competencia y a ganar una ventaja competitiva sostenible.
- Retroalimentación valiosa: Al centrarte en mejorar la experiencia del cliente, también obtienes información valiosa sobre las necesidades, preferencias y deseos de tus clientes, lo que te permite ajustar tus productos, servicios y estrategias de marketing de manera más efectiva.
“La experiencia del cliente es el puente que conecta la promesa de una marca con la satisfacción del consumidor, forjando relaciones duraderas y leales.”
¿Cómo medir la experiencia del cliente?
Estos indicadores se pueden complementar con otras fuentes de información, como las encuestas de satisfacción, las opiniones online, las redes sociales, los comentarios de los empleados, los datos de uso o las analíticas web.
El objetivo es obtener una visión integral de la experiencia del cliente, que permita identificar sus fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas.
Net Promoter Score (NPS)
Es un indicador que mide la probabilidad de que un cliente recomiende una marca, un producto o un servicio a otra persona. Además, un NPS positivo indica que hay más clientes satisfechos que insatisfechos, y cuanto más alto sea, mejor será la experiencia del cliente.
Customer Satisfaction Score (CSAT)
Es un indicador que mide el grado de satisfacción de un cliente con una marca, un producto, un servicio o una interacción específica. Además, un CSAT alto indica que los clientes están contentos con la experiencia que han tenido, y cuanto más alto sea, mejor será la experiencia del cliente.
Customer Effort Score (CES)
Es un indicador que mide el esfuerzo que tiene que hacer un cliente para resolver un problema, obtener una respuesta o completar una tarea con una marca, un producto o un servicio.
Un CES bajo indica que los clientes han tenido una experiencia fluida y sin fricciones, y cuanto más bajo sea, mejor será la experiencia del cliente.
¿Dónde comienza la experiencia del cliente?
La experiencia del cliente se inicia en una serie de interacciones o “puntos de contacto”, abarcando diversos canales de marketing, distribución, y factores internos y externos. No se limita a la visita a una tienda o a una compra en línea, sino que comienza desde la primera toma de conocimiento de la marca por parte del consumidor y se prolonga más allá de las estrategias de fidelización.
Cada experiencia del cliente se compone de múltiples interacciones, cada una importante por sí sola y contribuyendo a la percepción global. Estas interacciones deben ser evaluadas individualmente para identificar aquellas que puedan generar una mala experiencia y así poder mejorarlas.
Un ejemplo ilustrativo se encuentra en la industria de la aviación, donde la calidad de un viaje con una aerolínea está determinada por la combinación de experiencias a lo largo del recorrido del cliente. Si alguna de estas interacciones falla, la percepción general de la calidad del servicio se ve afectada.
Es común experimentar dificultades con las aerolíneas, donde incluso una buena experiencia de compra en línea puede ser empañada por problemas durante el proceso de servicio en el aeropuerto, como en el momento del abordaje, lo cual impacta en la percepción global de calidad.
Por lo tanto, es crucial que cada punto de contacto entre el cliente y la marca sea cuidadosamente atendido para garantizar una experiencia satisfactoria en general.
La experiencia del cliente comienza desde el primer momento en que interactúa con una empresa, ya sea a través de su sitio web, redes sociales, publicidad, o en persona en una tienda física.
Aquí hay algunos puntos clave donde la experiencia del cliente comienza:
- Descubrimiento: Cuando un cliente se encuentra por primera vez con la marca a través de publicidad, recomendaciones de amigos, búsquedas en línea u otras fuentes.
- Investigación: Cuando el cliente investiga más sobre la empresa, sus productos o servicios, comparándolos con otras opciones disponibles en el mercado.
- Interacción inicial: La primera interacción directa que un cliente tiene con la empresa, ya sea a través de una llamada telefónica, un correo electrónico, un chat en línea o una visita a una tienda física.
- Compra: El momento en que el cliente realiza una transacción y adquiere un producto o servicio de la empresa.
- Uso del producto o servicio: La experiencia que tiene el cliente al usar el producto o servicio, incluyendo la facilidad de uso, la calidad y el valor percibido.
- Soporte y servicio al cliente: Cualquier interacción que el cliente tenga con el equipo de soporte o servicio al cliente de la empresa, ya sea para resolver problemas, hacer preguntas o recibir asistencia.
- Postventa: El seguimiento que la empresa realiza después de que se realiza la compra, como enviar correos electrónicos de seguimiento, solicitar comentarios o proporcionar actualizaciones sobre el producto o servicio.
Punto de Contacto con el cliente ¿qué es?
Un punto de contacto con el cliente se define como cualquier interacción que influye en la percepción de la marca, producto o servicio por parte del cliente, ya sea intencional o no intencional.
Para ilustrar este concepto, consideremos un ejemplo relacionado con una nueva película en el cine y cómo diferentes puntos de contacto impactan en la experiencia del cliente en la taquilla:
- Expectativa generada: Los trailers de la película se difunden en redes sociales y generan una gran anticipación entre los espectadores. (Puntuación: 9/10)
- Información en la taquilla: Los empleados de la taquilla responden preguntas sobre la fecha de estreno y los horarios, proporcionando información clara y precisa. (Puntuación: 8/10)
- Marketing: Se lanzan anuncios en televisión y vallas publicitarias que destacan la trama emocionante y las actuaciones estelares. (Puntuación: 7/10)
- Compra de boletos: Los clientes pueden comprar fácilmente sus boletos en línea o en la taquilla sin problemas técnicos. (Puntuación: 9/10)
- Agotamiento de boletos: Al llegar al cine, algunos clientes descubren que las entradas para la primera semana están agotadas, lo que genera frustración. (Puntuación: 5/10)
Este ejemplo demuestra cómo diferentes puntos de contacto afectan la experiencia del cliente, desde la anticipación generada por el marketing hasta la facilidad de compra de boletos y la disponibilidad de entradas en la taquilla.
Es esencial medir y gestionar estos puntos de contacto para garantizar una experiencia satisfactoria para el cliente y obtener retroalimentación valiosa para mejorar continuamente el servicio.
¿Por qué es importante medir la experiencia del cliente?
Como puedes ver, la experiencia del cliente es un proceso complejo y dinámico, que implica múltiples factores y variables.
Por eso, medir la experiencia del cliente te permite:
- Conocer el nivel de satisfacción y lealtad de tus clientes.
- Identificar las fortalezas y debilidades de tu negocio.
- Detectar las oportunidades de mejora y las amenazas de la competencia.
- Tomar decisiones basadas en datos y no en intuiciones.
- Implementar acciones correctivas y preventivas.
- Evaluar el impacto de tus acciones y el retorno de la inversión.
- Innovar y diferenciarte de tu competencia.
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